Los cordones de tus zapatillas para correr desempeñan un papel importante en tu kit de herramientas para entrenar. No solo influye en el rendimiento y la comodidad general de la carrera, sino que unos simples cambios en el estilo de los cordones pueden corregir problemas comunes como el deslizamiento del talón y las ampollas.

Por tanto, si se te resbala el talón o te duelen los dedos de los pies, saber cómo atar las zapatillas puede solucionar el problema. Dado que los tipos de pie y los estilos de carrera varían, existe una gran variedad de técnicas para atado. ¡Sigue leyendo para saber más!

Técnicas para atar tus zapatillas

Si sientes molestias o falta de rendimiento, existen varias técnicas de atado que pueden ayudarte a conseguir un mayor ajuste y comodidad que se adapte a tu tipo de pie y estilo de carrera.

Es importante tener en cuenta que cambiar la técnica de atado puede solucionar algunos problemas, pero si la zapatilla no se ajusta a tu pie o entrenamiento, no podrás solucionar el problema. Por ello, asegúrate siempre de elegir la zapatilla deportiva y la técnica de atado adecuada.

1. Atado para cuando el talón se resbala o mueve

Las ampollas en el talón o el desgaste excesivo en la parte trasera de los zapatos son signos comunes de deslizamiento del talón. Esta técnica garantiza que los cordones no se aflojen y evita que el talón se salga del zapato, así como ayuda a reducir la fricción que causa ampollas y desgaste excesivo.

• Encaja los zapatos siguiendo el patrón entrecruzado habitual hasta el penúltimo agujero.
• Pasa el cordón por el último agujero de forma que el cordón salga por el interior de la zapatilla, creando un atado entre los dos últimos agujeros.
• Termina cruzando los cordones e introduciéndolos a través de los bucles que has creado y tira con fuerza asegurando el zapato alrededor de tu pie, y luego ata los zapatos como de costumbre.

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2. Atado para cuando hay sensación de apretado

Si tienes la sensación de que las zapatillas te aprietan demasiado en la parte superior del pie, un estilo de cordones “paralelos” o “de barra recta” que distribuya uniformemente los cordones para mejorar la comodidad puede ayudarte.

•  Ata las zapatillas de forma paralela, saltando los agujeros alternos de cada cordón y pasando este por el lateral de los agujeros para reducir la presión. 
•  Ata la zapatilla como de costumbre.

Si un cambio en el estilo de atado de cordones no alivia la presión, asegúrate de que tus zapatillas son las adecuadas para tu talla de pie, anchura y estilo de pronación. Te recomendamos que acudas a una tienda de calzado que te ayude con este tema.

3. Atado para cuando hay dolor en los dedos del pie

Si a menudo sientes dolor en los dedos de los pies, es probable que estés atando los cordones de forma incorrecta. Prueba una técnica de atado que eleva la puntera, dando más espacio a los dedos.

• Empieza atando desde el agujero del dedo gordo hasta el agujero de la parte superior del lado opuesto, de forma que atraviese todo el zapato en diagonal. 
• Con el otro cordón, asegúrate de que es unos 10 cm más largo que el otro cordón y crúzalo a través de todos los agujeros. 
• En la parte superior, anuda el cordón como de costumbre.

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4. Atado según la forma de tu pie

Los pies de cada persona tienen una forma única, por lo que es importante saber qué tipo de forma tiene tu pie. Por lo general, estos se dividen en pie ancho y pie estrecho. ¡Veámos qué técnica de atado de cordones es la adecuada según la forma de esta extremidad!

Pie ancho

Si tienes pies anchos, utiliza una técnica de atado de zapatillas que afloje todo el calzado y deje más espacio al pie. Sigue estas instrucciones:

• Primero, comienza con el cordón en un entrecruzado normal.
• Luego, enhebra el zapato en forma de cruz cada dos agujeros.
• Por último, ata como de costumbre .

Pie estrecho

Si tienes un pie estrecho, debes asegurarte de que el estilo de atado aprieta el zapato. Entonces, sigue estas instrucciones:

• Primero, empieza atando las zapatillas normalmente con un cruzado.
• A continuación, sáltate un agujero y enhebra el cordón en cruz.
• Al final, haz el cordón de forma entrecruzada como habitualmente.

¡Ahora ya sabes cuáles son las formas de amarrar tus zapatillas! Recuerda que estas técnicas pueden ayudarte a evitar lesiones y aportar un mayor ajuste. Sin embargo, primero debes contar con el calzado adecuado para ti. ¡Esperamos que esta información te haya sido de ayuda!

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